FLIA

FLIA

N° 3 - Me llegó una carta de Hawai.

Son las 6.25 am, la muchachada se fue y el trago está caliente, y no vi a mi amiga. Quizás por eso transcribo en este momento su aporte literario, que supo dedicar para la Cimarrón N° 3, la Gran Peña. Después a dormir... ya fue, no?


Me llegó una carta de Hawai.

Hola, ya sé que no sabes quien soy, pero ese no es el problema, yo tampoco sé quien soy, algunas personas me dicen hula hula. Y no me gustaba -me perturbaba mi denominación melódica y alegre-, quería sentir glamour, un nombre y apellido burgués. La gente mantiene una relación objetal conmigo, me manosea con sus caderas, giran y dan más vueltas.
No, no es producto del azar, elegí las coordenadas imprecisas de tu pueblo pero no las de tu país, me contaron de por allá, quiero probar algún mate y aprender a putear a los hawaianos, sus camisas apestosas de palmeras. ¿Me llevas a conocer? Temo que también me vuelva un objeto indistinguido por mi nombre, estaba imaginándome en otro seudónimo, pero las distinciones me alteran, derrapan hipocresía, llevame con esa gente común, que no libidinice sus caderas al verme, pero creo que lo voy a extrañar, ¿nací para eso? Cómo saberlo, me estoy volviendo pendenciero, tantos giros me exasperaron, grito pero no tengo voz, pero no quiero ser eco, soy voz y clamo mi dolor, soy hula hula, ya ves, los objetos también nos personificamos, nos volcamos de neurosis pasajeras de problemas mundanos.


Isabel Barberena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cimarrón #7

Don José en Cimarrón